A medio camino entre Sálvame de Lux y Tómbola; así se han convertido los plenos de la corporación calpina gracias al ingenio de la alcaldesa y de su fiel escudero. Ambos se complementan, se comprenden, cuecen y enriquecen. Algún día trasladarán su talento al escenario para disfrute del público en general; mientras tanto, han dejado para la posteridad momentos sublimes para regocijo de nuestro intelecto.
En lo que va de legislatura no hay colectivo que no fuese blanco de sus ataques, apoyando su intolerancia en argumentos poco sutiles.
Si la alcaldesa menosprecia a los no nacidos en Calp, su mano derecha, el Sr. Del Pino, hace otro tanto con la oposición; si la alcaldesa ataca de manera indiscriminada a algún edil, el Sr. Del Pino aplaude pletórico de júbilo. Es tal la connivencia y el buen rollito entre ambos que a veces pugnan entre ellos a ver quien dice la burrada más grande:
Alcaldesa: Tengo amigos gays y amigas lesbianas, eso es lo normal; lo que no es normal es dedicar una plaza al colectivo LGTBI o izar esa bandera en el ayuntamiento.
Sr. Del Pino: Nos negamos a que la biblioteca municipal compre libros de temática LGTBI; en una biblioteca van niños y no es bueno que encuentren libros de esos.
Con tanto talento para la comedia el pleno de la corporación calpina se ha convertido en un sainete de mal gusto, en un show caricaturesco que genera desafección en la ciudadanía, que observa, no sin estupor , como aquellos que fueron elegidos para gestionar los intereses de Calp se comportan como niños consentidos que se llevan la pelota a casa cuando se enfadan.
En el pleno de la corporación calpina celebrado el pasado lunes el ejecutivo local formado por el PP y C´s volvió a demostrar que les falta la altura de miras necesaria que exige gobernar una ciudad tolerante y cosmopolita como la nuestra. Rechazó una propuesta presentada por el PSOE para que el futuro instituto tuviese el nombre de una destacada mujer calpina que por sus méritos personales mereciese tal reconocimiento y, de esa forma , recuperar el nombre de mujeres que la historia haya invisibilizado por su condición o su lucha social.
La iniciativa socialista fue secundada por el resto de la oposición, pero la alcaldesa esgrimió, entonces, sólidos argumentos para que fuese rechazada: ¿Por qué tiene un instituto que llevar el nombre de una mujer? ¿Y por qué no el nombre de una cosa, acontecimiento o lugar? Nadie gana en SENSIBILIDAD y FEMINISMO a nuestra alcaldesa.
El éxito artístico de la alcaldesa suscitó cierto recelo en su fiel escudero quien, en el siguiente punto del orden del día, se esmeró en superar la actuación de su jefa. Esta vez el PSOE pedía una condena institucional de la invasión de Ucrania por parte de Rusia.
Todos los asistentes daban por sentado que dicha propuesta sería aprobada por unanimidad.
Pero nadie contaba con la versatilidad del Sr. Del Pino, renuente a votar a favor de cualquier propuesta de la oposición, por muy evidente o justa que esta sea. Al enemigo ni agua, fue lo que pensó el líder de Ciudadanos –y fiel escudero de la alcaldesa–, y desplegó sus dotes de prestidigitador y se sacó de su chistera a Bildu, el comunismo, los bolivarianos, Maduro, Nicaragua, Putin y Venezuela y todo ello lo agitó de forma difusa , profusa e incoherente en su afán de explicar lo inexplicable: votar en contra de una propuesta encaminada a condenar la invasión de Ucrania. El resto de ediles del PP y C´s siguieron a pies juntillas tal consigna, demostrando su preocupante falta de criterio.
Podría parecer hasta gracioso que los plenos de la corporación calpina se hayan convertido en un show esperpéntico donde el equipo de gobierno decide arbitrariamente sobre escaleras mecánicas innecesarias, o sobre vírgenes de bronce a precio de oro, o sobre la rehabilitación del Club social de La Manzanera a un coste de 1.200.000 € no obstante reducirse el proyecto a la mitad y que no obedece a ninguna demanda de la ciudadanía calpina … podría, como digo, hasta resultar gracioso si no fuera porque el dinero es nuestro, de todos los calpinos. Y a nadie le gusta que malgasten su dinero.
Sobra cinismo y falta seriedad
